GORDIANO III EL JOVEN EMPERADOR DE ROMA

INTRODUCCIÓN

El Imperio romano tuvo una historia repleta de emperadores que gobernaron en circunstancias diversas, desde épocas de esplendor hasta momentos de crisis. Uno de los casos más llamativos es el de Gordiano III, quien ascendió al trono a una edad excepcionalmente temprana y cuyo reinado se desarrolló en un periodo de grandes conflictos tanto internos como externos. En esta entrada, exploraremos en detalle la vida de este emperador, desde su ascenso al poder hasta su misteriosa muerte, analizando los factores que marcaron su gobierno y su impacto en la historia de Roma.

CONTEXTO HISTÓRICO

Para entender el ascenso de Gordiano III, es fundamental analizar el contexto en el que se encontraba el Imperio romano a mediados del siglo III d.C. Roma se hallaba inmersa en la llamada "Crisis del siglo III", una época de inestabilidad política, económica y militar que amenazaba la continuidad del dominio imperial. Las constantes luchas por el poder, la presión de los pueblos bárbaros en las fronteras y la inflación descontrolada debilitaban al Imperio.

Tras la muerte de Alejandro Severo en el 235 d.C., el trono pasó a Maximino el Tracio, un emperador de origen humilde cuyo gobierno militarista generó gran descontento en el Senado y entre la élite romana. En el año 238 d.C., una rebelión en África llevó a la proclamación de Gordiano I y Gordiano II como emperadores, aunque su mandato duró apenas unas semanas debido a su derrota frente a las tropas leales a Maximino.

El Senado, intentando contrarrestar el poder de Maximino, proclamó emperadores a Pupieno y Balbino, pero estos carecían del apoyo del ejército y fueron asesinados por la Guardia Pretoriana. En este caótico escenario, Gordiano III fue elevado al trono con solo 13 años, convirtiéndose en el emperador más joven de la historia romana.

ASCENSO AL TRONO

Gordiano III nació en el año 225 d.C., en una familia aristocrática con conexiones imperiales. Su abuelo, Gordiano I, era un senador respetado y gobernador de la provincia de África, mientras que su tío, Gordiano II, también tuvo un rol importante en la administración imperial.

El ascenso de Gordiano III al trono no fue resultado de una campaña militar o de una conspiración política planeada por su familia, sino de la necesidad del Senado de encontrar un emperador que pudiera servir como símbolo de estabilidad. Su juventud lo convertía en un candidato ideal para ser manipulado por la élite senatorial y los altos mandos militares.

Desde el inicio de su reinado, el gobierno real quedó en manos del Senado y de su tutor y prefecto del pretorio, Cayo Furio Sabinio Timesiteo, quien ejerció como regente de facto.

Gordien III. Creative Commons Atribución-Compartir Igual 3.0 Unported.

Busto de Gordiano III. Mármol, obra de arte romana, entre 242 y 244 d.C. De Gabii.

PRIMEROS AÑOS DE GOBIERNO

Dado que Gordiano III era un niño al asumir el poder, su gobierno estuvo influenciado por el Senado y por los altos funcionarios de la corte. Timesiteo, un político y militar experimentado, se convirtió en su principal consejero y virtual regente. Durante estos años, el emperador tuvo un papel más bien simbólico, mientras Timesiteo implementaba políticas para estabilizar el Imperio.

Uno de los primeros desafíos a los que se enfrentó el joven emperador fue la amenaza de los godos y otras tribus germánicas en las fronteras del Danubio. Aunque se lograron algunas victorias, la mayor preocupación era el Imperio sasánida en Oriente, gobernado por Sapor I, quien había comenzado una serie de ataques contra las provincias romanas en Mesopotamia.

CAMPAÑAS MILITARES CONTRA LOS SASÁNIDAS

En el 242 d.C., Gordiano III emprendió una gran campaña militar contra los persas. Esta expedición fue organizada en gran medida por Timesiteo, quien logró importantes victorias y consiguió recuperar varias ciudades ocupadas por los sasánidas. Sin embargo, el curso de la guerra cambió abruptamente cuando Timesiteo murió en circunstancias sospechosas, probablemente envenenado.

Tras la muerte de Timesiteo, el nuevo prefecto del pretorio, Filipo el Árabe, tomó el control de la situación. A partir de este momento, la estabilidad del gobierno de Gordiano III comenzó a tambalearse.

DECLIVE Y MUERTE DE GORDIANO III

La muerte de Gordiano III sigue siendo un tema de debate entre los historiadores. En el año 244 d.C., en la región de Mesopotamia, el emperador falleció en circunstancias poco claras. Según algunas fuentes, murió en batalla contra los persas; otras versiones indican que fue asesinado por sus propias tropas bajo la dirección de Filipo el Árabe, quien posteriormente se proclamó emperador.

Filipo trasladó el cuerpo de Gordiano III a Roma y lo deificó, lo que sugiere que quiso ocultar cualquier sospecha de asesinato. Sin embargo, la versión más aceptada es que Gordiano III fue víctima de una conspiración dentro de su propio ejército.

Pedestal de mabre amb una inscripció (CIL II 4606) dedicada a Gordià III (238-244 dC). Creative Commons Atribución-Compartir Igual 4.0 Internacional.

LEGADO Y REPERCUSIONES

El reinado de Gordiano III fue relativamente breve, pero dejó una huella importante en la historia de Roma. Fue un período de relativa estabilidad en comparación con los años anteriores y posteriores. A pesar de su juventud e inexperiencia, su gobierno logró mantener la integridad del Imperio y resistir amenazas externas significativas.

Su deificación por parte de Filipo el Árabe sugiere que, a pesar de su trágico final, su figura fue respetada en Roma. Además, su muerte marcó el inicio de un nuevo periodo de inestabilidad, con Filipo enfrentando problemas internos y externos que debilitarían aún más el Imperio.

CONCLUSIÓN

Gordiano III es un ejemplo fascinante de un emperador que ascendió al trono en circunstancias excepcionales y cuyo gobierno, aunque breve, estuvo marcado por eventos trascendentales. Su juventud y falta de experiencia hicieron que fuera manipulado por figuras más poderosas a su alrededor, pero su memoria perduró como la de un gobernante que, al menos durante un tiempo, logró mantener un grado de estabilidad en un Imperio en crisis.

LIBROS RECOMENDADOS

• "The Crisis of Empire: 235-284" – John S. McHugh

• "Historia Augusta" – Anónimo (traducción y comentarios de Anthony Birley)

• "Emperors and Usurpers: The Transformation of the Late Roman Empire" – Daniel N. Boos

• "The Roman Empire at Bay, AD 180-395" – David S. Potter

• Ritratto dell'imperatore Gordiano III (225-244 d.C.) bambino. Arte romana, metà del secolo III d.C.. Museo archeologico regionale di Palermo, 28 settembre 2006. Foto di Giovanni Dall'Orto.